¿Qué es un nebulizador pediátrico y para qué sirve?

Si tienes un hijo con problemas respiratorios, es posible que hayas oído hablar de los nebulizadores pediátricos. Estos dispositivos son muy útiles para administrar medicamentos inhalados a los niños, sobre todo cuando tienen dificultades para usar otros sistemas como los inhaladores o las cámaras espaciadoras. En este artículo te explicamos qué es un nebulizador pediátrico, cómo funciona, cuándo está indicado y dónde puedes encontrarlo.

¿Qué es un nebulizador pediátrico?

Un nebulizador pediátrico es un aparato que convierte un medicamento líquido en un aerosol de partículas muy pequeñas que se pueden respirar fácilmente. El nebulizador se conecta a una máquina que genera un flujo de aire que empuja el medicamento a través de una mascarilla o una boquilla que el niño debe colocarse en la boca o la nariz. De esta forma, el medicamento llega directamente a las vías respiratorias, donde ejerce su efecto terapéutico.

¿Cómo funciona un nebulizador pediátrico?

El funcionamiento de un nebulizador pediátrico depende del tipo de tecnología que utilice. Existen dos tipos principales de nebulizadores: los neumáticos y los electrónicos.

• Los nebulizadores neumáticos funcionan con un compresor de aire que genera la presión necesaria para nebulizar el medicamento. Son los más comunes y económicos, pero también los más ruidosos y voluminosos.
• Los nebulizadores electrónicos funcionan con una membrana vibrante o con ondas ultrasónicas que rompen el medicamento en partículas finas. Son más silenciosos y portátiles, pero también más caros y delicados.

En ambos casos, el niño debe seguir unas instrucciones para usar correctamente el nebulizador:

• Lavarse las manos antes y después de cada sesión.
• Preparar el medicamento según la dosis y la forma indicadas por el pediatra.
• Colocar el medicamento en el recipiente del nebulizador y conectarlo a la máquina.
• Ajustar la mascarilla o la boquilla al rostro del niño y encender la máquina.
• Instruir al niño para que respire normalmente por la boca o la nariz, según el caso, hasta que se consuma todo el medicamento.
• Apagar la máquina y limpiar el nebulizador con agua y jabón después de cada uso.

¿Cuándo está indicado un nebulizador pediátrico?

Un nebulizador pediátrico está indicado cuando el niño necesita recibir un medicamento inhalado para tratar una enfermedad respiratoria. Algunas de las enfermedades que pueden beneficiarse del uso de un nebulizador son:

• El asma, una inflamación crónica de las vías respiratorias que provoca dificultad para respirar, tos, silbidos y opresión en el pecho. El asma se puede controlar con medicamentos antiinflamatorios y broncodilatadores que se administran mediante un nebulizador cuando el niño no puede usar otros dispositivos o cuando tiene una crisis asmática severa.
• La bronquiolitis, una infección viral de los bronquiolos (las ramificaciones más pequeñas de los bronquios) que afecta sobre todo a los bebés menores de dos años. La bronquiolitis causa tos, dificultad para respirar, fiebre y falta de apetito. En algunos casos, se puede recurrir a un nebulizador para administrar solución salina hipertónica, que ayuda a fluidificar las secreciones y facilitar su expulsión.
• La laringitis, una inflamación de la laringe (la parte superior de la tráquea) que produce ronquera, tos seca y estridor (un sonido agudo al respirar). La laringitis suele ser causada por una infección viral o por una irritación ambiental. En algunos casos, se puede usar un nebulizador para administrar adrenalina, que reduce la inflamación y mejora la respiración.

¿Dónde encontrar un nebulizador pediátrico?

Un nebulizador pediátrico es un dispositivo médico que requiere una prescripción del pediatra para su uso. El pediatra es el profesional más adecuado para valorar la necesidad, la conveniencia y la forma de usar un nebulizador en cada caso. Además, el pediatra puede resolver las dudas y los problemas que puedan surgir con el uso del nebulizador, así como hacer un seguimiento de la evolución del niño.

Para encontrar un nebulizador pediátrico, puedes acudir a tu centro de salud o a tu hospital de referencia, donde te informarán sobre las opciones disponibles. También puedes consultar con tu farmacia de confianza, donde te podrán asesorar sobre los distintos modelos y marcas de nebulizadores que existen en el mercado. Algunas farmacias ofrecen también el servicio de alquiler o préstamo de nebulizadores, lo que puede ser una opción interesante si solo lo necesitas por un tiempo limitado.

En conclusión, un nebulizador pediátrico es un dispositivo muy útil para administrar medicamentos inhalados a los niños con problemas respiratorios. Sin embargo, su uso debe estar siempre supervisado por un pediatra, que es el especialista en la salud infantil. Si quieres saber más sobre los nebulizadores pediátricos o sobre otras cuestiones relacionadas con la pediatría, te invitamos a visitar nuestro directorio médico y de farmacias, donde encontrarás los mejores profesionales y establecimientos cerca de ti.